Esta crema es muy suave al paladar gracias a las manzanas, lo que contrasta de maravilla con la potencia que le aporta la nata y la mantequilla. Es un plato estupendo para esos fríos días en los que parece que nos falta energía. Esta cremita nos reconfortará a la par que nos cargará de energía.
La receta es muy sencilla y en tan solo media hora estará lista.
2 manzanas
150 ml nata eco
1 puerro
1/2 cebolla
15 g mantequilla
Agua
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Preparación
Lava el calabacín y córtalo en rodajas de un dedo de grosor. Pela y pica la cebolla. Pela y corta las manzanas en dados.
Calienta un poco de aceite en una cazuela y saltea las verduras y las manzanas. Cuando empiecen a dorarse añade el agua, la sal al gusto y cuece durante 10 minutos.
Pasado este tiempo retira la cazuela del fuego y reserva un poco del agua de la cocción con un cazo.
Añade la nata y la mantequilla y tritura hasta obtener una crema suave y homogénea. Incorpora al gusto el agua reservada si necesitas aligerar la crema.
A la hora de servir, puedes adornar la crema con unos chips de calabacín, con unas semillas y/o con un chorro de aceite. O no.
¿Qué te ha parecido esta receta? ¿Te animas a probarla?
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